Un último estudio publicado por la Fundación Mutua de Propietarios en colaboración con la cátedra UNESCO de Vivienda de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona ha demostrado que los edificios españoles están aún muy alejados de estar adaptados a los casi cuatro millones de españoles que sufren alguna discapacidad.
Según los datos que demuestra este estudio, solo un 0,6% de los casi 10 millones de viviendas que hay en España cumplen con los criterios de accesibilidad marcados por la Ley de Derechos de las Personas con Discapacidad y su Inclusión Social.
Estos datos son especialmente alarmantes debido a la obligación que tenían los edificios españoles de realizar las adaptaciones necesarias para facilitar el acceso a las personas con discapacidad antes del 4 de diciembre.
¿Dónde se encuentran los principales problemas?
Los principales problemas de accesibilidad se encuentran en el acceso desde la calle. El citado estudio demuestra que solo el 28% de las fincas tiene rampa de acceso, además de puertas demasiado pesadas o porteros automáticos no adaptados a personas en silla de ruedas.
Otro de los temas que más problemas genera es el ascensor, ya que el 22% de las viviendas no dispone de este medio tan necesario para la accesibilidad a los hogares. Por su parte, los garajes son otra problemática que los edificios deben tener en cuenta a la hora de adaptarlos, ya que las plazas de garaje no suelen ser adecuadas a las personas con movilidad reducida. Lo mismo sucede con las zonas comunes, las piscinas y los jardines.
¿Por qué no se adaptan las viviendas?
El principal inconveniente para adaptar los edificios a las necesidades de las personas con alguna discapacidad es el alto coste que supone, así como el desconocimiento por parte de la mayoría de edificios de la obligación de realizar las reformas necesarias.
Según el estudio realizado, el 55,7% de los 25 millones de edificios españoles es anterior a 1980 por lo que la opción de adaptar los edificios se encarece de manera considerable. Este hecho complica de manera importante la instalación de ascensores o rampas.
Además, otro dato destacable de la situación española es que es el país de la Unión Europea donde un mayor número de personas residen en pisos, ya que nos encontramos en una ciudad vertical.
¿Qué pasa con la obra nueva?
Ante esta situación, en VIVIENDEA creemos que, en un momento en el que la vivienda está empezando a construir de nuevo, estamos ante una oportunidad de construir edificios accesibles que satisfagan las necesidades de todas las personas y que cumplan con la normativa al respecto. Y vosotros, ¿creéis que se puede cambiar el modo de construir?
¿Cómo lo hacemos? Pues como siempre, escuchándoos. En Viviendea te escuchamos, a ti, como futuro usuario de la vivienda y ajustamos la vivienda a tus necesidades. Por eso, desde el principio te preguntamos por la necesidad de adaptar la vivienda a alguna discapacidad, para que, desde el inicio del proyecto, la vivienda se adapte a todas tus necesidades.
¿Cuántas viviendas adaptadas hacen falta en un proyecto de obra nueva? La respuesta es muy sencilla, las que nos pidáis.