Una nueva filosofía de espacios colaborativos cada vez está más en alza, tanto para viviendas para personas mayores o con dificultades sociales, como para jóvenes profesionales que buscan un espacio de trabajo diferente. El cohousing y coworking ya suenan en nuestro país, vocablos anglosajones para designar nuevas economías colaborativas que vienen de fuera.
En VIVIENDEA rescatamos la esencia de estas viviendas colaborativas, donde un grupo de personas sin conocerse tienen las mismas necesidades y se pueden juntar todos y avanzar para conseguir un mismo objetivo.
En este sentido, el modo de trabajar de la plataforma VIVIENDEA es crear una cooperativa de vivienda o comunidad de propietarios con las personas interesadas y conocer después sus gustos y necesidades. Entonces y sólo en ese momento, habrá que ponerse a buscar el terreno o edificio que reúna las condiciones más idóneas para todos. Así todos juntos, paso a paso, serán los promotores de su propio proyecto.
El cohousing es un término que suena desde hace algunos años en España, aunque ya lleva un tiempo desarrollándose en Estados Unidos, donde se comparten espacios comunes. Una comunidad formada por viviendas individuales pero donde las personas comparten servicios comunes, espacios verdes y hasta actividades sociales para sentirse en todo momento acompañadas.
Este tipo de vivienda colaborativa se ha desarrollado sobre todo para personas mayores, existen ya más de una docena de residencias para mayores de 60 años en España que siguen la filosofía del cohousing. Se trata de urbanizaciones o comunidades formadas con viviendas independientes y adaptadas a las necesidades de sus residentes para que las personas más dependientes puedan tener un espacio de vida con zonas y servicios comunes para limpieza, actividades de ocio, comedores, actividades sociales, todo ello gestionado por los propios usuarios que buscan de esa forma convivir con sus amigos o personas conocidas.
Una forma de cooperación que se está desarrollando sobre todo a la luz de los nuevos tiempos, donde cada vez los salarios son más bajos y los servicios más caros. De hecho, la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) alertaba sobre el riesgo de la jubilación, ya que estimaba que, para mantener un nivel de vida adecuado, la pensión debería suponer al menos un 70% del último salario que se percibió.
Para llevar a cabo este proyecto la figura clave es la del gestor, que es quién gestiona todo el proceso que concluye con la entrega de las viviendas a sus propietarios. En el caso de VIVIENDEA nuestra clave es hacer transparente esta figura, para que la relación sea continua.
Además, este tipo de vivienda colaborativa apuesta por conceptos que tienen que ver con la sostenibilidad, el medio ambiente y la arquitectura, dando lugar a toda una filosofía de cultura colaborativa y estilo de vida. Se apuesta por un consumo de colaboración, una alimentación ecológica, el uso de energías renovables para el autoconsumo, y también centralización de equipamientos y servicios.
Podría decirse que el cohousing se asemeja a un pequeño barrio o a una comunidad de vecinos bien avenidos, ya que desde el principio se crea con esa intención de vida colaborativa y buena convivencia.
Cabe destacar que los modelos de viviendas colaborativas se van a afianzando ya que dan soluciones a los nuevos tiempos que vivimos, en lo que todo cambia muy rápido y es mejor colaborar en conjunto que vivir aislados.